La Religión Marxista

Marx se hizo “marxista” a finales de 1843. A finales de 1847 produjo con Engels el Manifiesto Comunista. En la misma época, a modo de respusta al desafío que representa la “Cuestión Social”, una Casta Bárbara en sumo grado, que sólo profesaba odio a la Masa popular y a la Civilización, se adueña del poder en Londres y en París.

Es una Secta Pagana al extremo, predicando el Agnosticismo, la que orquesta teóricamente la práctica totalitaria de la Casta ; aquella misma secta que desde 150 años, va vociferando : ¡ el Marxismo es una Religión !

¡ Bueno ! ¿ y qué ? ¿ Por qué habría que negarlo ? En verdad, esta es la buena respuesta : ¡ ya es hora de que los Guías del pueblo asumen aquel hermoso insulto !

¡ Claro que sí, el Marxismo es una religión ! Sin enbargo hay que asentar la cosa con un rigor intelectual que no es el fuerte de los gnomos cerebrales del paganismo integro. Señores Grandes Inquisidores, demagogos oscurantistas, oid, pués, lo que viene a continuación :

● Primero, no pudo ser el Marxismo “una” religión en sentido estricto, sino sólo “religioso” en general ; y eso por la sencilla razón que así como no hubo más que un solo Diós, jamás hubo más que una religión.

● Segundo, el Marxismo no perteneció con pleno derecho a esta religión que siempre se ha reconocido exclusivamente bajo la forma de la Ortodoxia, mientrás que la religiosidad marxista fue una Herejía Panteista [1].

Por consiguiente la única pregunta digna de interés filosófico acerca de la religiosidad marxista, viene a ser la siguiente : ¿ Cómo, de modo completamente atípico, pudo llegar a verse totalmente descalificada la Ortodoxia religiosa tradicional, no dejando más posible legitimidad que a la herejía Panteista ? Es histórica la contestación.

El hecho decisivo fue la relación directa que se estableció entre el antecedente del movimiento que acusaba los privilegios del Antiguo Régimen, y la puesta al día, cada vez más aguda de la Cuestión Social, a continuación de la abolición de dichos privilegios. La Revolución Francesa se declaró con el “Gran Miedo” de los Sans-Culottes de las ciudades y del campo, ocasionando el Jacobinismo incontrolable de Robespierre y Napoleón. Esta vez, el Pánico del poder asentado resultaba de la creciente agitación de los proletarios en favor del Socialismo Democrático.

Tal fue la circunstancia que provocó la demisión general, y voluntariamente irreversible, de la Ortodoxia religiosa, cuyos representantes se cambiaron en apóstoles del Paganismo integro. Esta conversión no se hizo de un tirón, sino que tardó 50 años en formalizarse. El paganismo primeramente “rastrero”, y dominado por Ci-Devant (reaccionarios del Antiguo Régimen), se transformó en “declarado” y llevado por Ci-Après (reaccionarios del Nuevo Régimen), a partir de 1815, bajo el amparo de la Santa Alianza. Los Ci-Devant hablaban de Monarquía legítima y de santa Tradición ; los Ci-Après sólo hablaron de Estado de Derecho, de Orden y de Progreso.

Se puede notar que la constitución “definitiva” del Paganismo dominante se precipitó a partir de 1830. En el ejemplo francés aquella fecha es la de las Tres Gloriosas (revolución de Julio). Inmediatemente después, se promulgaron las “Leyes de Septiembre” liberticidas (1835). Se estableció totalmente el Paganismo con la matanza de los Quarantuitards [2] (junio 1848), que ponía en el pináculo a los dos chantres de la Anti-Religión : Comte y Proudhon.

Entonces, todas las ramas del árbol de la religión yacieron en el fango del Paganismo : los Idealistas se convertían en Clericales, los Empiristas se convertían en supuestos Librepensadores, los Místicos se convertían en Ocultistas, y los Ateas se convertían en Cínicos.

Por cierto, bajo el dominio Pagano completo y oficial, ninguna autoridad podía salvar la honra de la civilización espiritualista, excepto la del Pantéismo integro.

Una vez planteado el marco, que legitima fundamentalmente la hegemonía espiritual “excepcional” del Panteismo, ya puede empezar el examen particular de la herejía marxista. Cabe hacer ahora dos observaciones :

1- Surge el Marxismo cuando la Secta pagana puede llevar a cabo sus fechorías bajo el reino ya confortado de la Casta bárbara. El panteismo ya no se encuentra en absoluto en el ambiante anterior, formalmente civilizado, que se volcó entre 1835 y 1845. A consecuencia ya no puede tratarse de prédicas filantrópicas en favor del Socialismo, sino de reanudar sin complejo con la tradición Revolucionaria de la que se prevale la burgesía misma. Antes de 1840, sólo preconizaban la violencia los panteistas “políticos”, los Demócratas ; primero los Carbonarios, luego los Blanquistas (Sociedad de las Estaciones) : ahora se adhieren también los Socialistas.

2- ¿ Que se entiende por Panteismo ? Tanto en el ambiante civilizado como bajo el yugo bárbaro, el Panteismo consta de dos escuelas contrarias que cabe distinguir : una es “especulativa” (a esta la llama Marx “Idealista”), y la otra es “sensualista” (a esta la llama “Materialista”). De la escuela Especulativa salieron grandes maestros desde 1795 ; se puede citar por ejemplo a Godwin, Saint Simon y Pierre Leroux. Marx eligió la escuela Sensualista.

El Marxismo es una herejía panteista de tipo Sensualista, lo que nombraban los teólogos católicos herejía “judaizante”. Además, la herejía judaizante de Marx es muy especial :

● En TEORÍA, el marxismo conforta el Empirismo filisófico de Helvétius por medio de la ciencia económica de Ricardo ;

● El PROGRAMA del Marxismo apoya la meta final comunista de Babeuf con la experiencia concreta de la colonia modelo dada por Owen ;

● La ESTRATEGIA del Marxismo vuelve a poner al día el modelo de los Montañeses del año II (1793-1794) como lo que faltó al movimiento de los Cartistas ingleses en 1839 (es decir a la acción nacional de un sindicato de asalariados).

Aquel sistema completo que es el panteismo sensualista de Marx pide necesariamente una Lógica Mística : es la famosa Dialéctica de Hegel “volteada”. En Hegel, el desarrollo temporal del Mundo era una ilustración sabia y compleja del pensamiento contradictorio del Espíritu eterno ; en Marx el movimiento contradictorio inherente a la Materia eterna da una dirección necesaria a la acción perpetua que nos propone llevar a cabo el Mundo temporal.

¿ Cuál era la verdadera situación de Occidente hace 150 años (debiendo acarrear fatalmente la del planeta entero), y el verdadero significado que cobra entonces el advenimiento del Marxismo ? Cabe subrayar dos puntos :

1- El Paganismo general y con pretensión a ser definitivo, lleva las riendas ideológicas de la sociedad. Ello significa, según el esquema anterior en adelante proscrito, que socapa de Agnosticismo, Diós se ve puesto violentamente bajo la férula de Satanás ; el Diablo es quién se ve verdaderamente declarado Transcendente, mientras que a Diós le califican de “Principe malvado de este mundo”, lo cual es como declarar la guerra inexpiable a la “Metafísica”, este maldito virus civilizado que, “desgraciadamente” ha contaminado para siempre a la Masa Popular que, por eso, merece ser oficialmente considerada como el “enemigo del interior” hasta la consumación de los siglos.

¿ Podíase imaginar que, trás 25 siglos de civilización religiosa, un Panteismo de combate, indiscutiblemente legítimo no encabezara la Resistencia anti-bárbara ? (En efecto, no se trataba sólo de desafiar en el paganismo al Oscurantismo escandaloso de antes de 1840, sino también a la persecución en adelante desenfrenada – y, para colmo de insolencia, en el nombre mismo de las Luces y de la Tolerencia “Laica”.) ¡ Evidentemente no !

2- La herejía panteista Sensualista que representa el Marxismo, decidida desde 1845, había de conquistar una posición incomparable en la resistencia a la barbarie pagana ; y esto sin rechazar en la práctica la cooperación de la herejía rival del panteismo Especulativo, que seguía obrando, en particular en los movimientos patrióticos de las naciones oprimidas luchando por su soberanía política.

● Que la “religiosidad” del Marxismo, a la que se sigue esgrimiendo para mancillarlo, es lo que, al contrario, le honra para siempre ;

● Que si, en adelante, cabe hacerle reproches al Marxismo, es : de haber sido religioso sólo Objectivamente, y no de manera consciente ; y sobre todo de NO haber sido MÁS QUE religioso, lo cuál daba un limite esencialmente Defensivo a su combate heroico, manteniendo su Comunismo en los estrechos confines de la Civilización.

Haremos mejor y más fuerte con el Realismo que se afirma explicitamente como Materialismo-Espiritualista, y cuyo Programa se define claramente en el Com-Anar (Comunismo-Anarquismo).

Para los que quieran la versión auténtica, canónica, de la “religión marxista”, que nunca supieron dar los ladradores del Paganismo, aquí la tienen :

(Para soporte, se escogió el esquema de la Trinidad Católica, el más conocido.)

Diós en su misterio es “Materia en Movimiento”, que no podemos tocar, ni ver, tan sólo pensar.

● Mejor dicho Diós Inteligible, es el “Trabajo” ; ¿ Qué es crear, sino trabajar ?

TAL ES EL VERBO ETERNO, el Hijo por él engendrado y no creado.

● Este mismo Logos divino incarna verdaderamente en un libro, “El Capital”, palabra revelada de la Economía-Política Crítica.

TAL ES LA TORA [3] marxista, encerrando las “Tablas de la Alianza” [4] del Partido.

Interviene la divina Providencia a través de los fallos emitidos por medio de la “Lucha de la Clases”.

TAL ES EL ESPÍRITU SANTO, conexión entre el Padre y el Hijo que se expresa en el “sentido de la historia”.

El Marxismo incluye también, además de la Trinidad, toda la habitual maquinaria Teológica :

● El primer Papa del marxismo, su San Pedro, es muy famoso : es Carlos Marx en persona ; sus sucesores señalados en la cátedra apostólica son Engels, Lenin, Stalin y Mao.

● A los meros fieles (la masa de Israel según el espíritu, el Pueblo Electo, el Mesías colectivo) les llaman Proletariado.

● El Reino divino esperado es el Comunismo integro, el mundo sin Dinero y sin Armas, el paso del “reinado de la necesidad” al “reinado de la Libertad”.

● La vida Monástica que anticipa el Reino viene a ser el período de transición, durante el cuál se aplica la regla “A cada uno según su trabajo”, bajo el régimen de la Dictatura del Proletariado.

Por remate, pretende el Marxismo que representa el cumplimiento de la profecías :

● El Trabajo civilizado, fuente de riqueza en Valor, existe desde Adán y Eva en el Paraíso terrenal. Sólo que, nuestros Padres originales se dejaron tentar por la Serpiente burgesa, y probaron la fruta prohibida de la Propiedad. De ahí todas la desgracias del mundo : “el Hombre habrá de ganar el pan de su familia con el sudor de su frente, y la Mujer habrá de parir con los dolores del maritalado”.

● Sin embargo los Diez Mandamientos [5] del Sinaí londinense de Marx, que condenan totalmente la Explotación capitalista y la Opresión burgesa, fueron conocidos inmediatamente despuès de la caída original, ya que, desde aquel día, se alzaron Comunistas Utopistas. Pero fue en vano : en efecto la Idolatría siguió prevaleciendo cada vez más, bajo la forma del “fetichismo de la mercancía”.

● Por lo tanto, ¿ hay que deseperar ? Por supuesto que no, ya que, en tiempo señalado ya viene anunciándose por fín el restablecimiento de todas las cosas, merced a la predicación del Socialismo Científico.

¿ Es “Judío” el Marxismo, porque fue “judaisante” su Herejía panteista ? No exactamente.

Los integristas católicos son los que se embriagan de la versión judía del marxismo con el pretexto de que Carlos Marx nació (en Tréveris en 1818) del abogado Heinrich Marx, convertido al protestantismo poco antes del nacimiento de su hijo, pero descendiente de una familia de rabinos. En esto, ¡ se creyeron nuestros Lefebristas [6] en la obligación de llamar MORDECAÏ MARK LEVI al autor del Capital ! Este gracioso pasatiempo les evita a aquellos señores tratar tanto del Paganismo bárbaro como del Panteismo comunista...

¡ Señalemos que la versión judía dista mucho de ser la única en lanzar el anatema en el Marxismo ! ¡ Existe también la de Marx Masón ! Ahora bien no se queda a la zaga la Masonería : sus groseros Iniciados, con mucha trapacería van instilando el siguiente mensaje : por cierto que Marx fue un generoso utopista ; “desgraciadamente”, en la práctica, sólo pudieron inspirar sus ideas el terrorismo libertario y un régimen totalitario...

También existe una versión sorprendentemente actual, sugiriendo que el marxismo es Sarraceno, Ismaelista ; en pocas palabras, el Islam clavado. Marie-France Garaud, candidata gaulista en las elecciones presidenciales de 1981, lanzó la fórmula : el Khomeinintern sucede al Komintern (Internacional Comunista).

No era nuevo el argumento. Merece ser citado el ejemplo dado por Bertand Russell en 1921. Fue Russell una gran figura de Izquierdas, un pilar del “Labour Party”, y sin embargo (¿?) hecho Lord por su Majestad Británica. ¡ Menuda autoridad aquel Bertrand ! Premio Nobel de literatura y catalogado entre los Grandes Eruditos del siglo XX : Matematólogo y Filosofísico de primer plano.

Pues bien, casi cien años antes de Bush, Eurolandia, Juan-Pablo II y Ben Laden, el sus dicho “Sir” Bertrand Russell (1872-1970) asimilaba rotudamente el Bolchevismo con el Islamismo. Declaro sin ambages : “la mentalidad de Marx es poco diferente a la de Mahoma”...

¡ Verdaderamente, no repara en medios la Secta dominante del Paganismo Integro ! Están mobilizados todos los batallones del ejército Oscurantista : el Cenáculo llamado Racionalista, el Consistorio judío, el Sínodo protestante, la Curia papista, la Logia-Madre masónica ; ligados todos ellos contra la Religión, su vástago Panteista y el Marxismo.

¡ No cabe duda que la herejía panteista sensualista fue 100 % legítima y 100 % Saludable !

Fue Karl Marx un nuevo Filón-el-judío : este anticipó la cara Empirista del Cristianismo mientrás que Marx anticipó la cara Materialista de nuestro Realismo Com-Anar. Puesto que sólo es realmente judío nuestro Materialismo, por referirse al de la sociedad Parental pre-civilizada ; no lo era él de Marx, y al contrario permanecía un avatar del espiritualismo.

Para Marx nuevo-Filón la gloria de haber sido el más temible anti-Crémieux-el-judío, aquel alma condenada de la Masonería pagana “a la francesa”.

¿ Quiérase por fín librar la Tierra del yugo de la Casta Bárbara que la abruma y, para esto, distinguir de una vez quienes son nuestros VERDADEROS amigos y quienes nuestros VERDADEROS enemigos ?

Documentos

Crémieux

“La nueva Francia : el senador Crémieux (1796-1880). Era de Izquierda Republicana. En su entierro, Gambetta, Ferry, Arago, y Pelletan llevaban las cintas del feretro. Había firmado el acta de acusación en contra del ministerio Guizot. Aquel hombre bueno, caritativo, grán burgués, creía en la democracia, y no en la teocracia. En aquella época, la religión católica seguía siendo simpatizante de la teocracia.”

Bertrand Russell

“El bolchevismo compagina las características de la revolución francesa, con las del desarollo del Islam.

Ensenó Marx que el comunismo era fatalmente predestinado a tomar el poder ; esto engendra un estado de ánima próximo al de los primeros sucesores de Mahoma.

Entre las religiones, el bolchevismo ha de compararse con el Islam antes que con el cristianismo o el budismo. El cristianismo y el budismo son ante todo religiones personales, con doctrinas místicas y un amor a la contemplación. El islam y el Bolchevismo tienen una finalidad práctica, social, material cuya meta única es extender su dominio sobre el mundo.”

John Maynard Keynes

“¿ Cómo podría hacer mío un credo que, prefiriendo el fango a los peces, exalta al proletariado tosco por encima de los burgeses y de la inteligentsia que, cualquiera que sean sus faltas, encarnan el vivir-bien y llevan en sí los gérmenes de los futuros progresos de la humanidad ? ¿ Aunque necesitemos una religión, habríamos de encontrarla en los turbios raudales de inepcias que salen desbordando de las librerías rojas ? Con suma dificultad hallaría en ellos su ideal, un hijo culto, inteligente y decente de Europa occidental...

Como toda religión nueva, no saca su fuerza el leninismo de la multitud, sino de una pequeña minoría de convertidos entusiastas, dotados de un celo y una intolerencia que infunde a cada uno una fuerza equivalente a la de un centenar de indiferentes. Como toda religión nueva, el leninismo parece quitarle a la vida cotidiana sus colores, su alegría, su libertad, para no ofrecer, a modo de pálido sustituto, más que las caras de palo de sus devotos. Como toda religión nueva, persigue sin piedad ni justicia a todos los que intentan resistirle. Como toda religión nueva, rebosa de ardor misionero y ambición eucuménica. Al fín y al cabo todo esto viene a decir que aquí se trata de una religión y no de un partido, que Lenin es un Mahoma, y no un Bismark. Si queremos asustarnos a nosotros mismos, en el fondo de nuestros sillones de capitalistas, podemos figurarnos a los comunistas de Rusia bajo los rasgos de los primeros cristianos, quienes, bajo el mando de Atila, dispondrían de la potencia logística de la Santa Inquisición y de la Misiones Jesuitas para imponer una economía conforme al Nuevo Testamento.”

Karl Marx (1818-1883)

Friedrich Engels (1820-1895)

Lenin (1870-1924)

Stalin (1879-1953)

Mao Zedong (1893-1976)

[1] Los panteistas fusionan el Creador con su Creación.

[2] Los obreros parisinos partidarios del Socialismo Democrático en 1848. (nota de la edición)

[3] Cuidado con este punto preciso de la Encarnación :

Las expresiones sacadas del Judaismo sólo tienen un interés pedagógico. Nada que ver tampoco con la encarnación católica, la de Jesucristo el hombre-Diós.

En el Islam, es donde se puede encontrar un paralelismo : el Descenso del “Corán árabe”, eco de la Eterna Escritura conservada al lado de Alá.

[4] Louhot Ha-Berit = .

[5] ‛SÈRÈT HAD-D-BÂRÎM = .

[6] Partidarios de Monseñor Lefebvre, fundador de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X. (nota de la edición)

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Sumario

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